Valentina Story
Alinea, Chicago
Updated: Oct 31, 2021
Cuando creemos que la gastronomía ha llegado a la cúspide de creatividad y evolución, llega Grant Achatz para demostrar que la infalible búsqueda es el camino y que el límite es el cielo...

Una visita al templo de este gran cocinero; el famoso por el globo hecho de azúcar y el postre deconstruido sobre lienzo, es una experiencia inolvidable.
Cada momento de la velada queda en nuestras mentes como una fotografía que será analizada una y otra vez. Así se siente una noche en Alinea, como una fantasía.
Con sólo llegar a la mesa sientes que la magia comienza. Entre telas, humo y luces se encuentra una escenografía para recibir a los comensales en donde poco a poco van llegando pequeños bocados para dar sentido a la obra que está por iniciar.
El menú de degustación creado es un desfile de técnica y vanguardia, que a cierto modo no parece tener sentido por la extensa variedad que ofrece, pero el balance definitivamente se encuentra en el ritmo y las porciones perfectamente estudiadas.
La cocina de Achatz es pretenciosa, es atrevida y no solamente toma ventaja del gran producto que utiliza sino de su transformación. Así fue un plato basado en el maíz, que constaba de tres presentaciones diferentes y la más impresionante fue una preparación cremosa de Huitlacoche y sal rosada presentados en forma de canapé sobre una tortilla de maíz morado.
Los sentidos y la estimulación del paladar son definitivamente otra particularidad de Alinea. Muchos platos están concebidos para experimentar una extensa gama de texturas y temperaturas que mantienen al comensal en constante intriga. Esto se siente desde el principio con bocados como esferificaciones rellenas de líquidos, piedras frías, sabores cítricos con combinaciones inusuales y texturas gomosas dulces.
Los platos "fuertes" igualmente son presentados en forma de bocados como casi todos los tiempos del menú y aunque lo hacen de manera original, la calidad del producto es lo que destaca en estos platos, bien sea un trozo de wagyu A5, foie gras o algún animal de cacería como el conejo.
Por supuesto no podía faltar el postre, el sello de Achatz, el famoso globo hecho de azúcar, de forma perfecta, de textura inigualable, una demostración de técnica y vanguardia que ha sido referencia mundial. Y por último, el show, la música, la estimulación por completo de los sentidos para recibir el postre. Una obra sobre lienzo de preparaciones variadas que invita a los comensales a compartir y disfrutar del postre de manera libre y sin límites.
Alinea es sin duda uno de los restaurantes más importantes e icónicos de Estados Unidos, que ha roto barreras y detrás de este proyecto hay un grupo de genios en hospitalidad que no quieren parar de crear, este únicamente es el templo de un mundo sin fronteras que Alinea Group está formando través de la gastronomía.